“Voy a llevar un mensaje mucho más claro de amor, reconciliación y paz”: Silvestre
La presentadora barranquillera Mima Guao entrevistó al ídolo vallenato en Estados Unidos y se encontró con un Silvestre maduro, dedicado a su familia y entregado a su público.
Mima Guao
Para muchos ha sido increíble ver a un nuevo Silvestre Dangond. Escucharlo hablar en entrevistas y en sus propios conciertos es algo inesperado e inimaginable para la gran mayoría de sus seguidores e incluso para los que se declararon sus detractores. Pero ¿qué tan en serio es este nuevo cambio en la vida espiritual del artista? ¿Qué queda de aquel parrandero y mujeriego Silvestre?
Conversamos con el hoy renovado y más espiritual Silvestre. En esta entrevista, a diferencia de las muchas que he podido hacerle, tengo que confesar que sentí a un hombre distinto, más alegre, jovial y mucho más sencillo. Eso sí, Silvestre Francisco es el mismo hombre sensible, pero ahora tiene un nuevo propósito: viene dispuesto a ser instrumento para que con su cambio, muchos de sus seguidores se motiven a dejar el mal camino.
Silvestre, son muchos años luchando por el sueño de la música, en un ritmo en el que en tus inicios se pensaba no había cabida para nadie más. ¿Qué tuvo Silvestre de diferente para abrirse un espacio y posicionarse en el mundo vallenato?
Primero que todo Dios. Él tiene que ver mucho en el éxito de cada una de las personas. Él ya tenía planeado todo lo que iba a pasar conmigo, me regaló el don, el talento, y comienza a hacer la obra en mí. Silvestre es algo diferente por naturaleza, nací en otra época, crecí en otra sociedad, en otro ambiente, es lógico que mis gustos fueran un poco diferentes al vallenato de antes, pero no tan lejano, siempre iba ahí como de la mano, es tanto así que soy uno de los que conoce un poco del folclor y lo autóctono de esta nueva generación. Esa mezcla fue la que me ayudó.
Los que conocen tu carrera saben que siempre estás proponiendo algo nuevo en cada álbum, pero sin salirte del concepto vallenato y ese estilo que te caracteriza. ¿Cómo logras hacerlo, cuál es la clave?
Yo me dejo llevar por lo que siento, muchas veces me equivoco, muchas veces acierto, pero ¿sabes qué me gusta? Me gusta equivocarme proponiendo, no me gustaría equivocarme imitando y haciendo lo que está de moda o lo que los demás hacen. Me gusta siempre tener un criterio muy original y tener un punto de partida. Eso nace solo. No creas que eso me lo invento yo a propósito, eso va naciendo, las ideas van fluyendo a medida que los días pasando, a medida que yo voy viviendo. No es lo mismo el Silvestre de ‘La colegiala’ al Silvestre de hoy día, vivencias, sonidos, todo ha ido cambiando, evolucionando.
Siempre estás tomando retos que podrían verse arriesgados. El grabar junto a un artista urbano como Nicky Jam ha sido uno de ellos. ¿Alguna vez has pensado cantar otro ritmo que no sea vallenato? ¿Te arriesgarías grabando música para otro público?
Los riesgos siempre hay que tomarlos, en ésta o en cualquier otra carrera. Vivir en zona de confort es lo más fácil. Lograr un reconocimiento, un ritmo de trabajo y quedarse ahí haciendo lo mismo es lo más fácil, no me gusta, no va acorde con mi personalidad. Prefiero suspirar, que me lluevan las críticas y hacer algo siempre diferente y distinto. Desde que grabé ‘Sigo invicto’ que lo hice bien vallenato, el álbum más vallenato de mi carrera, traté de darle gusto al consumidor ‘vallenato-vallenato’. Ya después de ese disco, esperen de Silvestre Dangond cualquier cosa. Yo soy cantante, cantante, cantante. Para mí tener talento no es ser la súper estrella del canto, para mi tener talento es ser atrevido, yo pienso que soy atrevido (risas).
¿Cuál ha sido la decisión más difícil que has tenido que tomar en tu vida? ¿Por qué?
(Suspiro) ¡Ayy! Han sido tantas decisiones difíciles que he tenido que tomar, pero si hablamos de mi carrera musical, lógico, cuando me separo de Juancho. Claro teníamos 10 años de estar juntos, y el público lo veía como algo inseparable, y llegó el momento y me costó mucho trabajo tomar la decisión. Pero ya teníamos que hacerlo era un ciclo que se estaba cumpliendo y había que tomar la decisión.
A propósito de decisiones, para nadie es un secreto que decidiste cambiar tu estilo de vida en este momento. ¿Cómo defines a Silvestre Dangond, el ser humano y el artista?
Silvestre Dangond el ser humano y el artista hoy van muy de la mano, así como es su vida personal así es su vida artística, sana, limpia, amorosa, placentera y muy activa.
Silvestre, se ve muy emocionado cuando habla de Jesús. ¿Cuéntanos cuál ha sido la experiencia más bonita en esta nueva vida espiritual?
¡Si! Cuando se habla de Jesús, del Espíritu Santo, de Dios, es algo que casi siempre me quebranta, me doblega, porque cuando Dios me llama, me llama en amor. Yo pienso que el amor es la base fundamental para todo cambio. Cuando tú amas lo que haces, cuando tu amas a tu familia, cuando te amas a ti mismo, se producen cambios y eso fue lo que pasó conmigo, y en esta nueva vida espiritual, aunque no me gusta cantar victoria, si me gusta compartir el momento en el que estoy viviendo y sí puedo ser ejemplo para muchos, y sí mi testimonio le sirve a muchos lo hago. Es un camino difícil el cual tenemos que tomar con decisión, y seguir luchando porque no es fácil.
Uno de los pasos para llevar una vida en paz (Con Dios y consigo mismo) es perdonar. ¿Qué es lo más difícil que te ha tocado perdonar o a quién y por qué?
¡Uff! Sabes que ahí inició mi cambio… perdonando. Es más, hay gente que tú perdonas y ni se da cuenta que tú ya has perdonado y le da miedo acercarse a ti, pensando que tienes el corazón sellado. Yo tengo el perdón abierto, estoy “botao” con el perdón (risas) y el perdonar, me hace libre, y no solo el perdón sino el arrepentimiento. Es fantástico arrepentirse de todo lo malo. Es algo que te hace vivir.
Una de las cosas que suceden cuando te conviertes en cristiano es que muchos se molestan porque inevitablemente las personas cristianas cambian muchos hábitos, se pierden amistades y se ganan otras, ¿Has tenido opositores en esta nueva etapa de tu vida?
Si claro, pero no quiero traer eso acá, más bien trato de llevar un mensaje diferente. Al contrario, a los que juzgan o están todo el tiempo para ridiculizarme o criticarme, a esas personas las pongo en oración.
¿Silvestre dejarás de cantar música secular?
¡No! Para que veas que no. Es una de las preguntas que más se hacen mis seguidores, y la verdad es que no. He conversado mucho este tema con pastores y colegas cristianos y hemos llegado a la conclusión que el sitio mío es donde precisamente estoy. Cuando Jesús vino a la tierra, se metió dónde estaba la hoguera, la gente con el corazón necesitado, y Él llegó a proponerles un cambio y nada hago yo metiéndome donde la gente ya está cambiada. El puesto que me mandó Dios es distinto. Todos los ejércitos tienen frentes diferentes, algunos van a la guerra, otros se quedan en la oficina, otros en la parte de salud, otros en alimentación… yo estoy en una parte fuerte. Lo que sí es que voy a cambiar mucho mis letras, voy a llevar un mensaje mucho más claro de amor, reconciliación, arrepentimiento y paz.
¿Cómo te visualizas en 10 años?
Ganando mucho más almas para Jesús, eso lo tengo claro. No sé si cantando para muchas más personas, pero hacer algo más diferente de lo que hago ya sería ambición. Soy feliz haciendo lo que hago. Lo que Dios hace es perfecto conmigo y estoy feliz.
¿Qué mensaje le das a tus seguidores que no estuvieron muy conformes con que seas cristiano?
Bueno yo entiendo a muchos que no están de acuerdo, yo en algún momento también estuve en desacuerdo con las decisiones que otros tomaron, pero soy muy respetuoso. Les pido respeto, el respeto es la base del amor, si respetas también habrá muchos cambios en tu vida y espero que Dios tenga lo mejor para cada uno de mis seguidores y que vivamos en amor y en armonía.
Lo qué no sabías de Silvestre
¿Juguete favorito de niño?
El Atari.
¿Cocinas?
Si, ya no tanto cómo antes, ahora estoy en la onda light, me gusta comer ligero.
¿Tu mayor fobia?
Antes le tenía miedo a la muerte, hoy en día pienso que vivir en obediencia y mucha fe. La muerte se vuelve algo tan real, hay que vivir más bien inculcándole a tus hijos que hay que vivir en amor y mucha fe.
¿Tu perfume preferido?
(Risas) no tengo, es más ya ni me echo perfume.